El sábado de piñata se llena de embrujo en Daimiel
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La concentración del Pequebruji comenzó en la plaza
01 Marzo 2020

La fiesta familiar del ‘Pequebruji’ reúne a centenares de brujas y brujos en la plaza, a pesar de una tarde algo desapacible. Niños y mayores le cantaron al ‘Brujitó’ y bailaron al ritmo de la batucada y de la música de la comparsa ‘La Garrota’. ‘Los Amigos del Arte’ también se sumaron al pasacalles. Con la caída de la noche, los disfraces de terror se multiplicaron en el ‘Baile de las brujas’.

Daimiel Noticias.- Primero conquistaron la noche y ahora ya han extendido su hechizo durante la tarde del sábado de piñata. Las brujas daimieleñas, desde las que están aprendiendo los primeros sortilegios hasta las más experimentadas con el manejo de la escoba, fueron las grandes protagonistas en el epílogo del carnaval daimieleño.

El aquelarre inicial lo organizaron en la Plaza de España, punto de partida del ‘Pequebruji’, la iniciativa con la que Festejos e Infancia han dado pie a ampliar el embrujo daimieleño a plena luz del día. Una oportunidad que ha calado entre las familias con niños y niñas en edad escolar, y que permite ver a padres e hijos disfrazados juntos y pasándoselo de miedo tras la estela de ‘Brujitó’, el tótem de esta fiesta. Este año se le volvió a invocar haciendo un gran círculo a su alrededor, seguido después la música de la comparsa de ‘La Garrota’ para bailar una conga alrededor del Olivo Milenario.

Con la batucada ya preparada en la cabeza de pasacalles, el recorrido hasta el Pabellón Ferial fue la constatación de las ganas que todavía quedaban de carnaval. Por ahí estuvo también ‘Superdiente’ y el color violeta de las capas de ‘Los Amigos del Arte’, que cerraban el desfile con la carroza donde se vio a Doña Sardina por última vez.

La concejala de Festejos, Alicia Loro, destacaba la animación que también se vivió en el pabellón con el grupo de monitores y, sobre todo, la participación que se registró, a pesar de la tarde algo desapacible. Loro avanzaba que la intención del Ayuntamiento de Daimiel es que el sábado de piñata se convierta en el Día de la Bruja y para ello se buscará la mejor manera para empezar antes. “Vamos a hablar con las peñas para ver si podemos preparar talleres infantiles por la mañana o celebrar alguna comida solidaria al mediodía, queremos que sea un día más completo aún”.

Y al mismo tiempo, manteniendo la capacidad de convocatoria del ‘Baile de las Brujas’ al que de nuevo se desplazaron seres misteriosos de otros pueblos de la provincia. Despedida multitudinaria para un carnaval 2020 que deja satisfecha a la concejala de Festejos porque, aunque “haya cosas que mejorar”, ha habido “fiesta y disfrute para todas las edades”.   

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