Se trata de una iniciativa encuadrada dentro de los actos de homenaje del conocido artista daimieleño, previa a la clausura de la exposición que ha permitido sacar a la luz obra de D’Opazo. La cita, congregó en sus dos sesiones a 14 amigos, familiares y alumnos del artista que compartieron anécdotas, recuerdos y vivencias con él desde el Espacio Fisac donde se ha ubicado la galería de estas pinturas.